DIARIO DE UNA MADRE.

Cuando me haya ido...  A ese lugar que no tiene regreso. Su llanto no podré secar, porque ya no estaré aquí. También sé que vendrá a ...



Cuando me haya ido... 

A ese lugar que no tiene regreso.


Su llanto no podré secar, porque ya no estaré aquí.
También sé que vendrá a su mente el mal recuerdo 

que en sus mentes dejé... Lo sé...

Si de algo sirve, quiero que sepan... Que ese daño
en mi corazón grabé... Y día con día, por ese daño,
yo también lloré.

Me arrepentí mil veces de hacerlos sufrir...

 El porqué lo hice... ¡No lo sé!
 Porque en verdad les digo, que los amé tanto...

  Como también sé que ustedes me
 honraron al darme el título de mamá...

Y si su corazón por mi culpa sufrió, no se compara
con el sufrimiento que por ustedes llevé.


En un mundo de penitencia me envolví, pero en vano
fue... Porque de sus corazones no se borró jamás
el daño que les causé... 

Ni con todo el amor que los envolví.
Cómo lo siento... No haber sido esa madre perfecta
que ustedes hubieran querido tener.
¿Pueden ver la miseria en que me convertí?


Llena de culpas y de hastío... 

Por qué no hubo una escuela...

¿Que me enseñara a tener hijos sin lastimarlos?
Quizá no debí nacer... Quizá fui un accidente de la
vida, y así me convertí en el peor accidente de su vida.


¿Qué le vamos a hacer?
He llorado, he sufrido, he deseado morir;
pero nunca me arrepentí de haberlos conocido...
Cuando los vi en su cuna durmiendo...

Les juro que fue lo más maravilloso que jamás sentí... 
Ustedes fueron la fuerza que adquirí en el tormento 
de mis desvaríos, y sus vidas me ayudaron  a seguir.

A buen tiempo... No adquirí la experiencia que debí...
Tuvieron que pasar los años y aun así... Conociendo
mis errores y desaciertos, no pude evitar seguirlos
cometiendo... 
Solo fui una mala madre que los obligó a hacer lo
correcto, aunque vieran mis errores...
Les doy las gracias por obedecer...
No les pido perdón, porque sé que no lo merezco,
solo les suplico que no cometan los mismos errores
que yo.

Sé que fui Juez y verdugo, y muchas veces los castigué... 
Y reconozco que muchas de esas veces me equivoqué...


Por desgracia no hay poder extrasensorial, que nos
guíe a una perfección, donde no se cometa error.

Copyright Derechos reservados

Escrita por Ely Rmz

You Might Also Like

0 comentarios