El hombre que me dañó a mi, lo hizo porque no supo sobrellevar
el dolor, y desquitó su rabia, su despecho...el cual le causó, la
mujer que el amó, mas que a su vida misma

La desquitó en mi....la paradoja...es que lo amé en mi inocencia y
le di lo mejor de mi vida.


No lo justifico....fue cobarde su proceder....¿ Que podía yo hacer?
No, no voy a llenarme de rencor, tampoco soy débil...
Si, fui lastimada...¡ Como lo siento! Mas por mi familia que por mi....

Ese dolor tan terrible...¡ No lo olvidaré jamás !...Está en mi cerebro...
en el casette de mi memoria...

No soy una tonta, ni una santa...definiendo mis sufrimientos, fue mas
el dolor y la decepción...que la humillación y los golpes recibidos.
Ese dolor punzante, se convirtió en desprecio...nunca lo odié...pero
me asqueó su proceder.
Aprendí a verlo, como a un ser vil y despreciable, porque usó sus
manos para imponerse, de manera tremenda...abusando de su fuerza...
en una mujer, y en unos bebés...producto de su miserable ser....


No deseo que esté en el cielo...pero eso no depende de mi....
Hizo de mi vida un infierno...Lo justo...sería que estuviera el ahí...